Cuando fui invitado a redactar este blog, pasaron muchos temas por mi cabeza, desde los tan trillados como hablar de la importancia de las finanzas en la economía individual hasta la relevancia de cultivar buenas prácticas empresariales en la mejora del clima organizacional, la verdad quería presentar algo que fuera creativo, diferente y lo más importante, que dejara algo nuevo, un aprendizaje y llevara a los lectores a indagar sobre este tema, que despertara el interés de seguir profundizando.
Pues bien, voy a redactar un blog sobre inteligencia artificial... ¡usando inteligencia artificial!, así como lo lees, vamos a desentrañar los misterios, las maravillas y los riesgos de esto que se ha convertido en tema de conversación y que en algunas ocasiones no se conoce tan claramente. ¿Estás listo para esta montaña rusa digital donde la IA habla sobre sí misma? ¡Ajusta tu cinturón, porque esto va a ser entretenido y divertido!
¿Te imaginas un mundo donde las tostadoras saben exactamente cómo te gusta el pan y tu refrigerador te recuerda que debes comprar leche? ¿Qué tal un espejo que te diga qué traje te queda mejor o un vehículo que se conduzca solo mientras tú tomas una siesta o atiendes los temas de tu oficina o del hogar?
¡Bienvenido al siglo XXI, donde la inteligencia artificial (IA) está revolucionando nuestra existencia! No, esto no es un episodio más de "Black Mirror". Es la realidad de hoy.
Un viaje Relámpago a través del tiempo…
¿Sabías que hace apenas unas décadas, la idea de los científicos de crear una máquina pensante era pura ciencia ficción?, todo comenzó en 1950 cuando Alan Turing, el genio matemático, nos retó a imaginar si las máquinas eran capaces de pensar en forma autónoma. Así nació el Test de Turing, una prueba que aun hoy desafía a las mentes más brillantes.
Sigamos avanzando, en la década de los 60´s los primeros programas de Inteligencia Artificial comenzaron a sorprender al mundo, aunque con limitaciones, para llegar finalmente al aprendizaje profundo, este avance encendió la chispa que catapultó a la IA a la vanguardia de la tecnología moderna.
Cómo la IA Está cambiando nuestra vida diaria
Hoy los asistentes virtuales son tus mejores amigos, “Hey Siri, ¿qué tiempo hace hoy?" ¿Te suena familiar? Siri, Alexa y Google Assistant no solo responden preguntas; son tu mano derecha para recordar citas, tocar tu música favorita y hasta encender las luces sin moverte del sofá.
Gracias a la IA, Netflix sabe qué serie maratonearás el fin de semana y Spotify te crea playlists perfectas para cada momento. ¡Es como si leyeran tu mente!
Hoy la IA te diagnostica a través de infinidad de datos médicos para predecir enfermedades y recomendar tratamientos personalizados revolucionando la atención médica, en muchos países circulan por las calles automóviles que se conducen de manera autónoma, en tu casa ya existen termostatos que identifican tus hábitos para mantener el mejor ambiente, por si fuera poco, existen sistemas de seguridad que vigilan tu casa y transforman tu hogar en una fortaleza inteligente y segura.
Sin embargo, no todo es color rosa… la automatización puede ser un arma de doble filo, por ejemplo la recolección de datos personales a través de los diversos dispositivos que usualmente utilizamos, transgrediendo la privacidad, creando contenidos falsos, emitiendo noticias irreales que puedan influir negativamente en la opinión pública causando desinformación masiva. Atentar contra la población mediante ciberataques con drones militares y robots de combate autónomos que conlleven a conflictos bélicos avanzados que propicien una carrera armamentista de IA con consecuencias verdaderamente devastadoras, no vayamos tan lejos, la automatización excesiva puede llevar a la disminución de la creatividad y el pensamiento crítico al reducir la capacidad de los humanos para tomar decisiones informadas y críticas.
En resumen
la inteligencia artificial ha dejado de ser una fantasía del futuro para convertirse en una realidad del presente, desde simplificar las tareas cotidianas hasta impulsar descubrimientos científicos transformando de manera asombrosa el mundo, sin embargo, el desafío es mantener un equilibrio entre la innovación y la responsabilidad ética. Así, podemos aprovechar al máximo sus capacidades mientras protegemos lo que nos hace humanos: nuestra empatía, creatividad y capacidad para cuestionar y aprender. ¡El futuro con la IA es emocionante, y depende de nosotros guiarlo hacia un camino de progreso equitativo y sostenible lleno de posibilidades que desafían la imaginación hacia un mundo mejor para todos!