Hasta hace unos años los centros de datos eran áreas desprotegidas y con funciones polarizadas, no existían parámetros para medir rendimiento, seguridad ni mucho menos redundancia en sus procesos. Se cumplían con las funciones monobásicas: mantener los equipos encendidos en un espacio determinado. Esto ha cambiado, la industria ha aumentado su procesamiento, la disponibilidad de la información en tiempo real se convirtió en prioridad.
La demanda de las empresas por procesamiento y almacenamiento de información en la nube ha impulsado la industria de los centros de datos, los cuales, son grandes áreas que ofrecen la capacidad de albergar equipos e información por un costo asociado al consumo y espacio. Esta oportunidad permite a medianas y pequeñas empresas a utilizar la tecnología y servicios en la nube sin necesidad de construir su infraestructura. Sin embargo esta decisión de ¿construir o contratar?, permitirá una ventaja competitiva frente a la competencia y/o conocer los factor clave de éxito del negocio.
Analizaremos algunos criterios que se deben tener en cuenta para tomar la mejor decisión.
Un análisis retrospectivo de cómo está conformada la estructura de TI y cuál será su proyección, es un buen punto de partida. Se analiza esta información a través del modelo de eficiencia y su fórmula de Espacio/Potencia, se calcula el área y capacidad neta del centro de datos. En este punto se tiene la capacidad (N) o carga critica de la organización, luego se analizan el impacto para la organización la falla de un sistema y se correlaciona con la Redundancia, Disponibilidad, Confiabilidad y Resiliencia que debería tener la información. Más de 10 subsistemas conforman el universo de un centro de datos y cada sistema estará alineado con un diseño y una normatividad que garantizara la operación de acuerdo a lo planificado. Cuando se decide construir, la organización deberá tener presente estos conceptos, como también el lugar físico, la facturación mensual de energía, el costo de la operación, el equipo humano para mantener la infraestructura, las licencias ambientales, licencias de construcción, operadores de energía, inversión en mantenimientos y seguridad física, depreciación del activo y las renovaciones de infraestructura. A estos factores se agrega la responsabilidad de mantener disponible la operación del sistema.
Si la decisión es contratar un espacio y almacenar en un tercero la información, la responsabilidad de operación es transferida al operador, los costos de operación de TI disminuyen, la inversión inicial no es necesaria y el coste de personal especializado para el centro de datos se reduce, es una propuesta atractiva, sin embargo se debe profundizar en los detalles, detrás de las facilidades que se tiene al tercerizar, está el costo mensual por uso de espacio, o costo por consumo, la seguridad de la información y la flexibilidad en el crecimiento, es una variable muy importante a considerar. El punto de inflexión está alrededor de dos variables, la primera, capacidad de potencia por Rack, el cual tiene un costo mensual y segundo, la capacidad de espacio, que en términos técnicos son: TIER y Confiabilidad.
Entonces las pregunta resuelta de cuando construir o contratar centros de datos, está basada en la cantidad y capacidad de la infraestructura de la organización, que de acuerdo a la experiencia es recomendable construir un centro de datos cuando la capacidad por rack supera los 6 KVA y la cantidad de gabinetes supera los 8 gabinetes.